jueves, 18 de octubre de 2012

Plaza Pública y Democracia


”Llamamos, pues, ciudadanos de una ciudad al que tiene la facultad de intervenir en las funciones deliberativa y judicial de la misma, y ciudad en general, al número total de estos ciudadanos que basta para la suficiencia de la vida”.

Aristóteles, Política, libro III, cap. I

Los espacios públicos y en especial las plazas, han sido siempre lugares representativos para las ciudades durante muchos siglos, no solamente por ser simples puntos de encuentro y desahogo de la población, si no por los significados y las diferentes funciones que puedan tener y trasmitir en un proceso de fortalecimiento de las identidades urbanas, una de estas actividades está ligada al uso político de los mismos en la toma de decisiones de una determinada sociedad para elegir su destino como pueblo, es el caso de la relación entre las plazas públicas y el uso de la democracia como forma participativa de gobierno, fenómeno que se ha dado en varios países de occidente y que empezó en Atenas hace 2500 años.

Hasta el siglo V a.c. en las sociedades teocráticas y monárquicas de oriente medio no existía la plaza según el concepto moderno del mismo, en muchas ciudades de Mesopotamia, Egipto y Palestina, el centro de los núcleos urbanos eran el complejo de palacios para el rey y su corte, o los grandes centros ceremoniales destinados al culto religioso, rodeadas en muchos casos de murallas e inaccesible para la población urbana que vivía alrededor de estos recintos, en ambos casos se daba al interior de estas edificaciones, grandes patios para las ceremonias de diversa índole, como el palacio de Sargón II en Dur – Sharrukin (Irak), el Zigurat Etemenanki de Babilonia o el Santuario de Amón en Karnak, Egipto. En la Grecia Minoica, se da una situación parecida, las ciudades se desarrollan en torno al palacio del rey, ubicado generalmente sobre una colina (acrópolis) y alrededor de ella se va desarrollando las aéreas residenciales, de manera irregular y orgánica, como los casos de Cnosos y Malia en Creta, sin embargo, estas no tenían murallas (1), teniendo un crecimiento expansivo y libre, cosa que no llego ocurrir en las ciudades del periodo Micénico, como Micenas y Troya, donde se daba una subdivisión de la ciudad por murallas y torreones, diferenciando el palacio del resto de la ciudad, muy parecido al los modelos de medio oriente.

Zigurat de Babilonia. Grandes Civilizaciones

Es probable que el surgimiento de las primeras plazas se den ya desde el periodo Minoico en Creta, aunque ya se han visto vestigios de aldeas de la edad de bronce y hierro más al oeste, en la península ibérica, donde se da la presencia de espacios abierto como lugares para la actividad comercial, con una jerarquía espacial muy importante. En el caso cretense, la ciudad de Gurnia contiene una plaza importante en su centro, ligada al palacio del rey (2), podemos decir que la aparición de estos espacios o “Ágoras” se generen en los pueblos y culturas del centro y el occidente del mediterráneo europeo, entre el tercer y primer milenio antes de Cristo, aproximadamente.

Plano de Gournia. Sweet Briar Collage

Después de la Edad Oscura Griega, en el Periodo Arcaico, surgen nuevas ciudades con Ágoras destinados no solamente al uso mercantil, sino también para los ritos religiosos y las fiestas. Poco a poco, estas plazas empiezan a tener una importancia bastante fuerte en las ciudades, desplazando a los palacios y a los templos como centros del poder, esto se da en paralelo a un proceso de cambios que se da en la vida política de toda Grecia, en especial en la ciudad Atenas, donde tras la caída de la Monarquía, surgen nuevas formas de gobierno que la remplazan. Así, el poder va recayendo primero en una elite oligárquica (Eupatridas) para luego en el siglo VI a.c., y tras las reformas de los legisladores Solón y Cleistenes, crearse un nuevo modelo de gobierno participativo donde el pueblo toma las decisiones, surge así la democracia, esto se da cuando Solón reformó la estructura del estado creando nuevas instituciones como la Ekklesia o Asamblea participativa, donde los ciudadanos mayores de 18 años eligen a los magistrados o arcontes y a los miembros del Areópago, ambos, representantes del poder ejecutivo y judicial de la polis y en la que se toman decisiones de índole político, judicial y militar. Es justamente en el Ágora de Atenas donde se da la primea asamblea, convirtiendo este espacio en un lugar de discusión ciudadana donde sus habitantes dirigen los destinos de la polis. Así, el surgimiento de la democracia está ligado a la plaza, como centro político de la ciudad griega, algo que no tiene precedentes en otras civilizaciones antiguas y que marca un hito no solamente en el proceso evolutivo de la ciudad a través de la historia, sino también en la evolución política y social de la civilización occidental y del mundo entero.

Maqueta y Plano del Agora de Atenas. Mi Moleskine Arquitectonico

El uso del Ágora para las Asambleas continuó hasta las reforma de Cleistenes en el 507 a.c., a partir de esa fecha, las reuniones se empezaron a dar en el Pnyx, una colina rocosa ubicada al oeste de la Acrópolis, en la que se construyó una plataforma semicircular con un diseño adecuado para estos eventos.

Agora de Atenas en la Epoca Clasica. Mi Moleskine Arquitectonico

Este caso se repitió de manera parecida en la Roma republicana, con las asambleas por tribus desarrolladas en el foro, ya sea para elegir a los cuestores y ediles  o a los tribunos de la plebe. Posteriormente, estos eventos participativos en las plazas se han dado en muchas ciudades de Europa Central, sobre todo en Suiza, donde desde tiempos remotos se establecieron las llamadas Landsgemeinde o Asambleas Cantonales y que aun hoy en día se desarrollan en dos cantones importantes(3): Glarus y Appenzell Rodas Interiores, estas reuniones se dan una vez al año y en ella se eligen al Consejo Cantonal, los tribunales y algunos funcionarios locales, además de debatir las leyes del Cantón y los presupuestos participativos del mismo.

Foro de Roma. Foto Enrique Cortes


Landsgemeinde en Glarus. Wikipedia - Adrian Sulc


Por otro lado, el sistema democrático y su relación con el espacio público va mas allá de una simple elección política,  son en las plazas y las calles donde los ciudadanos ejercen sus derechos libremente, en la que pueden manifestar su disconformidad hacia sus gobernantes, (el caso reciente de la plaza Tahrir del Cairo, en el ultimo levantamiento de Egipto por motivo de la primavera árabe). También tiene que ver con el libre acceso al mismo y al uso de diferentes actividades ya sea de índole cultural o recreacional para todos los ciudadanos, sin distinción de raza credo o condición social, lugar donde las sociedades manifiestan sus alegrías, penas y cóleras, su cultura y sus identidad, donde el ser ciudadano es un derecho y donde el anonimato, es la base de cualquier forma de integración social, idiosincrasia, y nos establece como iguales el uno con el otro (4).

Manifestacion en la Plaza Tahrir. El Espectador

Es curioso ver que en muchas ciudades, las manifestaciones políticas o las celebraciones se dan en un grupo de plazas o calles específicos y siguen a la manera de un tour, un desplazamiento desde un punto de reunión hasta el  lugar donde se dará la concentración principal, generalmente una plaza emblemática o un lugar generalmente cercano a las edificaciones donde están los poderes ejecutivos o legislativos del país, por ejemplo en el caso de Madrid, (donde se han dado en los últimos meses fuertes manifestaciones de los indignados y la sociedad civil debido a la crisis económica que se esta dando actualmente en España), las concentraciones humanas empiezan en la plaza de las Cibeles y continúan por la calle de Alcalá hasta la Puerta del Sol, donde se agrupan los manifestantes de manera permanente, o hacia la Plaza de Oriente (frente al Palacio Real), en la que en el pasado se dieron los grandes mítines del falangismo español y la Plaza del Congreso, que ha sido testigo, en las últimas semanas, de fuertes choques entre grupos de indignados y policías. En el caso Limeño, se da una situación relativamente parecida, los manifestantes se agrupan en la Plaza Dos de Mayo, donde se encuentra las sedes de los diferentes gremios y sindicatos, para luego continuar por la Av. Nicolás de Pierola hasta la Plaza San Martin, en la que se dan las actividades principales y los mítines políticos, esta puede continuar hacia el  Parque Universitario (frente a la sede de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos) y luego siguiendo la Avenida Abancay llegan al Congreso Nacional. Es curioso ver como se genera una ruta ya establecida, a la manera de una secuencia, en donde ciertos espacios cumplen un rol importante en esta especie de ceremonia cívica y reivindicativa, independientemente de la violencia y los disturbios que pueden ocurrir después.


Manifestaciones en la Calle de Alcala. Madrid. madrilonia.org


Plaza San Martin. Lima. Noticias Cajamarca - El Regional


Otro ejemplo del uso democrático del espacio publico esta ligado a las manifestaciones culturales, como exposiciones de arte temporal (pintura, escultura y grafitis), conciertos, actuaciones o performances, pasando por actividades literarias (ferias de libro), donde toda persona puede acceder y disfrutar de estos  eventos de manera libre y abierta.

Concierto Plaza Dam. Amstardam. Foto Enrique Cortes

Feria del Libro Ricardo Palma. Lima. La mula.pe


Para finalizar, en el Perú, lamentablemente, los espacios públicos no llegan a ser tan democráticos, a parte de los procesos de condomización que viven nuestros barrios y calles, existe sobre todo en las plazas, una forma de diseñar y organizar los espacios que lo hacen poco permeables y funcionales, en las ágoras anteriormente mencionadas y en las plazas públicas de las ciudades europeas, el espacio era usado en su totalidad y democráticamente para todos, en la que se daba cualquier tipo de actividad, en nuestra realidad, un diseño espacial y volumétrico muy barroco y recargado, con una decoración excesiva de jardines y monumentos, hacen que se den una hibrides de parque plaza (¿o es plaza o es parque?), que impiden el uso y el funcionamiento de la misma en su totalidad, lo que le resta legitimidad, el echo de prohibir pisar el césped, debido a una banal y superficial visión paisajística, hace que tampoco cumpla el rol de parque, lo que finalmente  hace de nuestras plazas, espacios castrantes y poco accesibles, un ejemplo es nuestra plaza de armas capitalina, donde los jardines son barreras que hacen que las personas no puedan usar la misma en su totalidad cuando hay una actividad masiva, llámese actuaciones, desfiles etc. Algo que no existía en la época colonial cuando estaba libre de jardines y se podía usar para unas serie de usos y actividades como la corrida de toros, autos de fe, procesiones, fiesta, mercado, un uso muy democrático en una sociedad que irónicamente no tenía nada de democrática. ¿Porque se dan esos procesos híbridos de parques plazas en nuestras ciudades?, será tema de otro artículo próximamente.

Fuentes:
(1) Muller, Werner y Vogel, Gunther. Atlas de Arquitectura, Tomo 1. Generalidades. De Mesopotamia a Bizancio. Pag. 137.
(2) Ibid.
(3) Los cantones suizos son espacios políticos y administrativos en la que se subdivide la confederación suiza, existen 26 cantones en todo el país como parte de un sistema federal donde tienen cierta autonomía.
(4) Tokechi, Juan. Takano, Guillermo. “Espacio Publico en la Ciudad Popular, del Vacío Arenal a la Construcción Ciudadana”. Construyendo Nuestra Interculturalidad, Año 5, N° 5, Noviembre del 2009. Pag. 3.